Romper el miedo y aventurarse en nuevas experiencias es esencial para fortalecer nuestra vocación y expandir nuestros conocimientos. Cristina Millán es un ejemplo de ello. Ha aprendido a superar sus propios límites y a no temer intentar algo que realmente quiere. A continuación, compartimos la entrevista en la que Cristina nos cuenta sobre su motivación, el proceso de selección y las actividades del programa Generación Docentes.
Entrevistador: ¿Qué te motivó para solicitar esta beca para realizar las prácticas en un entorno rural?
Cristina Millán: En primer lugar, tuvimos que leer el libro «Cinco panes de cebada», que cuenta la historia de una maestra rural. Al leerlo, me pareció bastante interesante el estilo de educación que describe. Unos meses después, vi información sobre la beca en el Instagram de ESCUNI. Decidí investigar más en la página web y averiguar en qué consistía. Cuando me informé sobre Generación Docentes y lo que ofrecía con las prácticas rurales, supe que debía presentarme y vivir la experiencia. Algo en mi interior me impulsó a intentarlo, pero aún estaba en primero y tenía que esperar hasta estar en tercero para solicitarla y realizar las prácticas en cuarto. Me pareció una experiencia única para aprender metodologías más activas en entornos rurales, lo cual podría enriquecer mi formación de manera significativa y preciosa para mi futura carrera como maestra.
Entrevistador: ¿Cómo ha sido el proceso de selección y qué has aprendido en él?
Cristina Millán: La primera parte del proceso de selección consistió en rellenar unos cuestionarios explicando por qué quería la beca, qué creía que podía aportar y qué tema de TFG me gustaría abordar y por qué. Además, se debía adjuntar el expediente académico, una recomendación de un profesor de la universidad y una video presentación de unos dos minutos en la que me presentaba y explicaba mi motivación para solicitar la beca.
Unos meses más tarde, nos informaron por correo si habíamos pasado a la segunda fase o no. En esta fase, participamos en tres talleres online, donde, en algunos momentos, trabajamos en pequeños grupos para buscar soluciones a situaciones propuestas, compartimos cómo nos sentíamos después de los talleres y realizamos juegos para dejar libre la imaginación.
Una o dos semanas después, recibimos otro correo informándonos si habíamos pasado a la tercera y última fase: la entrevista personal. Esta entrevista tenía como objetivo conocernos de manera más individual, hacernos algunas preguntas y resolver nuestras dudas.
Al finalizar las tres fases, nuestro expediente, junto con los cuestionarios iniciales, el video y la recomendación, la información de los talleres online y las respuestas de la entrevista, fueron evaluados. Después de unas semanas, nos comunicaron por correo electrónico si nos habían concedido la beca para realizar nuestras prácticas en una escuela rural.
Sobre todo, he aprendido a superar mis propios límites y a no tener miedo de intentar hacer algo que realmente quiero.
Entrevistador: ¿Cuáles son las actividades del programa Generación Docentes de las que te vas a beneficiar a lo largo del próximo curso?
Cristina Millán: Gracias a la beca, a partir de septiembre comenzaremos con una formación online, aunque aún no sabemos los temas de estas formaciones. También realizaremos un par de viajes para conocernos y poner en común la formación. La razón principal por la que solicité la beca es la oportunidad de realizar prácticas en un colegio rural durante cuatro meses en Galicia, Castilla y León, Aragón o Extremadura. Aún no sé la comunidad ni el pueblo que me ha tocado, pero estoy segura de que será una experiencia única.
Entrevistador: Muchas gracias por compartir tu experiencia, Cristina. Te deseo mucho éxito en tu formación y prácticas.
Cristina Millán: Gracias a ti. ¡Un saludo!